Porque no lo quisiste no tuviste mi amor.
Pablo Neruda
Porque éramos amigos y, a ratos, nos amábamos
Rosario Castellanos
la avisé
es probable que sea
este beso un beso menos
luego que la idealización
es una autoidealización
somos lo que deseamos
todo cuerpo es un palimpsesto
que aquí no se dan las acacias
que un día no tendrás
espejo en que extasiarte
tú preferiste otrosí
los caminantes al camino
los marineros al mar
los bebedores al vino
los funtivos a la función
los psicólogos a los locos
los lectores a los libros
las memorias a los recuerdos
las biografías a mi vida
concurrida muchacha impoluta
Federico J. Silva
El bueno del hombre podría haber escrito el poema pensando en mí pero no me conoce. O eso creo. O espero.
El de Rosario Castellanos citado da auténtico pavor y, como la amo, os lo dejo también.
AJEDREZ
Porque éramos amigos y, a ratos, nos amábamos;
quizá para añadir otro interés
a los muchos que ya nos obligaban
decidimos jugar juegos de inteligencia.
Pusimos un tablero enfrente de nosotros:
equitativo en piezas, en valores,
en posibilidad de movimientos.
Aprendimos las reglas, les juramos respeto
y empezó la partida.
Henos aquí hace un siglo, sentados, meditando
encarnizadamente
cómo dar el zarpazo último que aniquile
de modo inapelable y, para siempre, al otro.
Rosario Castellanos
Ahora respiramos todos y seguimos leyendo cualquier otro blog. ¿Sí?