miércoles, 27 de mayo de 2009

¡Panerianos del mundo, uníos!

Sí, sigue siendo el libro del bolso y hace mucho tiempo que es de mis poetas favoritos. Hace mucho tiempo que es mi absoluto favorito entre los vivos. Al menos entre los vivos que conozco. Pasé demasiado tiempo llorando mi edición perdida y ahora que la he recuperado me regodeo (para bien) en ello.

Puede, sólo puede, que con esta entrada agote el torrente de Paneros de los últimos tiempos. Empieza a ser acritud y lo sé.

La culpa de todo la tienen Jaime Chávarri y Ricardo Franco. Antes de conseguir ver las dos películas (¡por fin!) yo era una paneriana sólo de Leopoldo María y que no era especialmente compulsiva. No más que con todo lo demás. O sea, mucho.

Que acabara de recuperar mi edición (Poesía completa 1970-2000) también ayuda un poco. Las pestañas negras de Michi, en cambio, no demasiado. Eso es algo coyuntural. Sigo siendo total y absolutamente devota de Leopoldo María, aunque el hermano guapo diga que es un coñazo. Aunque esté como una cabra (lo está, qué duda cabe), aunque se haya pasado en su deseo (en su necesidad) de malditismo. Realmente (y quien me conoce puede corroborarlo) nunca me han gustado los chicos guapos. Claro que cuando lo dice ya no se pasa la mano por el pelo ni deja caer los párpados. Ni siquiera tiene ya maneras suaves. Pero se sienta sobre una tumba, pasea con su perro y dice que Leopoldo escribe cada vez peor. Eso tampoco se lo perdono. Lo de Leopoldo. Lo de sentarse sobre la tumba y pasear con el perro era positivo.

Hay varios poemas de Panero (o sea, Leopoldo María, que ni papá ni hermano mayor me gustan -ni los he leído- demasiado, del tío no conozco nada y Michi, hasta donde yo sé, no escribía poemas) que me gustan particularmente y no están (todavía) aquí. Dos que siempre voy a poner pero nunca lo hago (y que van ahora mismito) y uno que no recordaba pero sabía que era el que buscaba cuando hice la entrada de El desencanto y declaré mi odio más feroz a doña Felicidad. Es este:


LA MALDAD NACE DE LA SUPRESIÓN HIPÓCRITA DEL GOZO

«Jois e Jovens n'es trichaire
e malvestatz es d'aqui»

MARCABRÚ



Una cucaracha recorre el jardín húmedo
de mi chambre y circula por entre las botellas vacías:
la miro a los ojos y veo tus dos ojos
azules, madre mía.
Y canta, cantas por las noches parecida a la locura,
velas
con tu maldición para que no me caiga dormido, para que no me olvide
y esté despierto para siempre frente a tus dos ojos,
madre mía.



Los otros dos son, como Proyecto de un beso, como Diario de un seductor, dos de los poemas en los que pienso antes que en casi cualquier otro cuando pienso en Panero. O de los que más me gustan. O que más veces me han dado en los ojos. O... o, en resumen, de los que me parecía imprescindible poner, aunque finalmente nunca lo hiciera. Hasta hoy.



EVE

(Vida y mujer en hebreo, y en inglés, víspera)

A Mercedes, por el hilo que la une al secreto

Porque hiciste mi gesto eterno supe
que eras la muerte: porque ella sólo podía
amarme si no había
hombres para mí, vivos:
sólo ella podía amarme:
y supe también que tú eras
la muerte, y que me amabas.

El rostro de la Humanidad era
para mí el de nadie: como para ella,
como para ti: eres negra y no quieres
nada de lo que vive y no sabe
hasta morir que te desea.
Y vi a través de ti, cómo surgían
y surgen cabezas de la tierra helada:
cabezas, yelmos, corazas, espadas
es el fruto que cosecha la tierra en este a ño
que tanto recuerda al Último, al siguiente,
y me amaste porque yo lo veía, porque
veía crecer ya en el huerto el fruto
monstruoso que incorporaba en sí
todo dolor e injusticia y desastre

y me dijiste: «He aquí mi primer hijo
yo que nada sabía del ridículo gesto
de nacer» y agregaste:
«Este reirá de todo,
y lo encenagará todo con
el veneno de su risa mortal:
cuando no haya nadie
que recuerde cómo se reía, este reirá»
Y te reíste de mí, como mi madre
al ver que yo había nacido de ella.
Tan inmenso
era el frío en las ciudades
que algunos sabían que no era locura
ni es, creer que caerán sobre mí

o seré yo el que caiga al morir sobre tu cuerpo.

Pero en el frío crecían
seguían creciendo -la peor de las alfombras de césped
los huesos y la carne de los soldados
que crecían sobre la tierra helada. Y me dijiste
«ellos no tendrán miedo, porque están
muertos, lo mismo que tú que me amas,
a mí que soy negra
como la vida e hice una piedra de tu gesto»
Y los muertos brotaban sobre la tierra húmeda
-cabezas, yelmos, corazas y espadas
porque la Muerte se había hecho vida.

Y pregunté
-te pregunté entonces-: «Será mi alma buen
alimento para perros?»

Y contestaste: «no esperes
que ella sirva para otra cosa: aquella
fue creada
y pensada lo mismo que tu cuerpo y huesos para
nutrición de los perros finales -lo mismo
que tu palabra. «Y ¿nada he de esperar?» «Nada»
Y vi como espadas y corazas y yelmos
surgían sobre el campo más yermo.

Y me olvidé.




Acojonante, ¿no? Digno de alguien capaz de hacer "de su cadáver el último poema":


DEDICATORIA

Más allá de donde
aún se esconde la vida, queda
un reino, queda cultivar
como un rey su agonía,
hacer florecer como un reino
la sucia flor de la agonía:
yo que todo lo prostituí, aún puedo
prostituir mi muerte y hacer
de mi cadáver el último poema.



Además, en tanto en cuanto que bonus track, contaros que El Desencanto (ahora que por fin la tengo, voy y lo descubro) está online entre los videos de Google. Enterita. Después de tantos años, en cambio, dista mucho de estar casi entera en youtube. Está la parte referida a Leopoldo María (lógico, esperable) y poco más. Sí, me dió fuerte. Sobre todo porque llovía sobre mojado.

¿Alguien se une?



PS. Redacté ayer, moribunda. Acabo de cambiar un par de signos de puntuación, de eliminar unas frases, de añadir otras y lo lanzo al mundo.



13 never more:

Anónimo dijo...

El trabajo puede ser castrante (sobre todo en cuestión de vídeos), pero desde luego a tí te da para deleitarte (y deleitarnos) con tus torrentes.
Los Panero no son (o no lo han sido hasta ahora) mucho más que una noticia de su existencia para mí, pero se están convirtiendo en (otro) de esos temas pendientes que se me acumulan.
Beso agradecido por ello.

Juan A. dijo...

Gracias por recuperar a Panero (Leopoldo María) para nosotros. Maravillosos especialmente Eve y Dedicatoria, aunque el primero es poderoso como un ciclón.

Todo Panero es una experiencia fuerte y turbadora. Yo también me refiero a Leopoldo, claro,

Te dio fuerte, sí, como tiene que ser. Como conviene a una chica melodramática, apasionada que se llame Meryone y cuyo primer amor fue un poeta maldito llamado Edgar Allan Poe. Qué cabía esperar?

Lo dicho: un millón de gracias y un millón de besos.

Elaine Crespo dijo...

Meryone!

Saudades!

Estou comentando pouco!
Nem fotolog nem blog!
Um pouco doente!
Jogo o Post e só!

Minha irmã te adicionou!

O blog dela é www.mirtesmile.blogspot.com!

Monha irmã mais nova!
Mais estou gostando dos postes dela!

Beijos em folerpa e George!

Acho que hoje consigo postar o conto!
Isadora disse que digita se eu escrever no caderno!

Um beijo Grande!!

Saudades

beijos
Elaine

payomocion dijo...

orale! he estado ocupado y no habia podido pasar a leerte... y con lo mucho que me gusta!

(+_+) ... dijo...

Simplemente irresistible¡¡
yo amo un poema de Panero que va así:

"Huyendo de la muerte encontré el ciervo de la locura
irreal para perseguirlo con mi desdicha con mi desdicha concreta, presente
en donde lavan sus pies los dioses."

es "huyendo de la muerte"...

jejeje recordaras que lo he relacionado con mi osito de goma suicida...

Como siempre un gustazo pasar a verte'''
me quedo un ratito màs para ver de que me he perdido los ultimos dìas.

Muchos besos quridisima Meryone

pd. puse una cancion en el blog de las mordidas¡¡ je'

Leo Zelada dijo...

Panero y Ory son los mejores poetas españoles vivos.

Buen post Meryone.

Xose dijo...

Me uno. Absolutamente. Tú simplemente di. :)
Un beso enorme.
Me encantan estos paneroposts antológicos -en todos los sentidos-.
Muchos besos

NANO dijo...

.:.

por supuesto, currado como siempre...

panero? nada, lo que posteaste...

los autores que leo los puedo contar con los dedos de las manos (y no se si las dos) ... así que siempre te utilizo para saber de que va la literatura (y las artes, el cine, la pintura, tus desnudos, la música)...

(el lunes es uno de los mejores días para salir)

me encantó el PS...


salud!

(y besos)

.:.

jess dijo...

Fíjate que no lo conocía (ay qué raro conmigo caray!), pero me ha gustado.

Claro que la manera en que lo sabes manejar es el origen de mi interés.

Como siempre, un gusto enorme pasar a leerte mi querida Meryone!

Un fuerte abrazo!

fiorella dijo...

Es dulce,es terrible,es melancolía...me genera sentimientos contrapuestos.Un beso

Kyuuketsuki dijo...

Solo me queda agradecerte por resultar un interesante oasís de poesía en medio del desierto oficinista. Gracias por publicarlo :D

(ah si, sin esto y sin el tuiter, moriría)

Meryone dijo...

Nadna: es que estaba sola en la sala y en vez de salir a leer el periódico, estuve retocando la entrada que tenía a medias. De nada. Te mandaría uno exclusivo para ti desde aquí, pero puede que el resto se celen. Luego te dejo uno en tu sitio.

Juan Antonio: es que Meryone es intensa y vehemente, qué le vamos a hacer. Hay que quererla igual.

Elaine: já vi a sua irma. Logo vou para o seu.

Casi un Dios: a mí me han hecho muy feliz tus últimas entradas. Aunque tampoco estoy leyendo tantos blogs como debería.

Mary Lore: me encantan los textos de heroína y otros poemas. Son como la poesía de cancionero (hasta tienen ciervos) hablando de la heroína. Luego voy a ver tu canción.

Leo: a mí Ory no me ha convencido nunca demasiado. Claro que yo siempre he practicado la necrofilia literaria. Panero es sublime.

Ulyanov: me planteo seriamente pasarme por un día a Juan Luis para que empecéis a odiarme todos.

Nano: A Panero hay que amarlo, leerlo, releerlo, declamarlo, reverenciarlo, etc.

Jess: Paneros hay por aquí para parar un tren. Sobre todo los últimos días.

Fiorella: es inigualable.

Kyuuketsuki: sigue tuiteando y bloggeando y no mueras, que a mí me hace muy feliz tu blog y eres de los tuiters más fieles. Gracias.

Besos para todos.

uminuscula dijo...

yo también odié a felicidad cuando vi el desencanto
luego ya menos..

voy a seguir leyendo que me quedé ahí..