domingo, 7 de junio de 2009

¿Estrenar una vida diferente?

WATER STREET

El mundo nos resulta ajeno, inhóspito.
Debiera ser destruido por completo.
Construir un mundo nuevo sin sus ruinas.

Y estrenar una vida diferente.

Pero al pasar el tiempo el nuevo mundo
tampoco hallarán propio nuevos hombres..
También ellos querrán un mundo nuevo.

Mejor fuera destruirlo y no hacer otro.

José María Fonollosa



Mejor, realmente... y eso que ando en una de las etapas más optimistas de los últimos años. Claro que el optimismo no quita la percepción de la realidad.

11 never more:

Anónimo dijo...

lindíssimo poema sobre um outro mundo, sem ruínas deste aqui ou quem sabe do outro lado da ponte, como diria Bendetti:

"en la otra orilla alguien me espera con un durazno y un país".

Compartilho de certa forma seu realismo otimista (ou otimismo realista).

a modiño dijo...

¿Hablamos de la contingencia, del mal, del deseo del bien? De algo no exterior al propio hombre ¿De la esencia de lo humano? "Na" menos...
¿Pero podría ser de otra manera?

Sí. A veces no solo resulta inhóspita sino terrible la vida, pero otras, fantástica. Tan fantástica que algunos la creen promesa "do outro lado da ponte". Yo mientras y a trompicones, lo quiero creer humildemente.

a modiño dijo...

¿Y por otra parte?
¿De qué valdría un mundo físico sin el hombre?
Al menos nadie lo contaría, lo sufriría, lo gozaría, lo viviría.
Así que destruyendo al hombre se destruiría el mundo, no tendría sentido...
Tal vez.

Iuiu dijo...

Solamente sería poner fin a una obra de teatro, para escribir una de nueva.

Un nuevo guión, con unos nuevos actores y otro escenario de fondo.

Y ésta obra terminará, y seguirá otra, y otra, y otra.

La definición nunca se dará, la creación siempre será constante.

Kyuuketsuki dijo...

Estrenar una vida diferente no, meryone. Volver a crear, recrear, vivir, hacer de nuevo, reformar, cambiar... eso es lo que he hecho siempre y me gusta

Rotter dijo...

es lo que siempre he dicho

me sabe mal pensar asi, pero pue que arda todo y todos

Juan A. dijo...

El mundo siempre será ajeno e inhóspito.

Besos.

Xose dijo...

El optimismo no tiene porque ir acorde con una visión objetiva de lo que hay. Para bien y para mal. Buenos días :) Y un beso!

Erick dijo...

Que se acabe el mundo!

Paredro es una figura similar a la del döppelganger. Un doble que es yo, pero es otro. Yo se lo aprendí a Julio Cortázar en "62/modelo para armar", pero parece que él lo sacó de un viejo manuscrito griego. Pero nada es seguro, las raíces de la palabra son oscuras y su uso en griego muy fragmentario.

Gracias por mirar el post más egomaníaco de mi historia.

Saludos.

payomocion dijo...

bueeeno bueno, el mundo será lo que cada quien quiera pensar, pues definitivamente todos tenemos una percepcion diferente del mundo según nos plazca y segun nos nazca verlo de cierta manera... el hecho es que ya estamos aqui, no queda mas que disfrutarlo...

Martina dijo...

Efectivamente. Yo iré con Chase. Si logras convencer al tipo que no es tu novio incluso podríamos vernos.

Es jodidamente urgente estar allí, para mí supone ya no sólo el placer de verle a él (hace tiempo que tengo la extraña concepción de que ya no existe, sobre todo por todos esos poemas inesperadamente extraordinarios en cualquier persona viva) sino también la reafirmación de la línea divisoria que nos separa de esos gafapasta comepollas que infectan todos los buenos conciertos donde no deberían estar; algo así como todos los izquierdistas desinformados que enturbian la ideología de izquierdas propiamente dicha.

El año pasado una conspiración se erigió en mi contra y los astros se alinearon para que no pudiese ir al FIB de ninguna manera, así que ahora es como si Dios mismo me hubiese colocado ese concierto ahí para hacer justicia por una vez, antes de que el viejo muera, se convierta automáticamente en toda una leyenda para los modernos e INDITEX comience a fabricar camisetas con su cara.