lunes, 3 de noviembre de 2008

Añoro

Dizque Albert Plá acaba de sacar disco y se llama "La diferencia". Salió pasadísimo, como siempre, el otro día en Buenafuente, mientras yo me lamía las heridas en el sofá de María. Hizo un resumen de una de las canciones del disco (lo que quiere decir que la cantó en cuestión de segundos, en pleno blancazo) y se puso el casco de la portada. Poco más, porque lo sacaron en cuanto pudieron.

Siempre me ha gustado Albert Plá. Desde que era el cura que en Airbag cantaba "Soy rebelde". Más desde que descubrí que al cabrón se le entiende mejor cuando canta en catalán que cuando canta en español. Y fue gracias a él (como el resto del país, seamos realistas) que descubrí al amigo Fonollosa. Un señor que me gusta mucho desde que, con la cinta que aún conservo y que tiene el "Supone Fonollosa", el "No sólo de rumba vive el hombre" y tres canciones del "Actos inexplicables" de Nacho Vegas (al que descubrí en ese momento), Iago me dejó el libro de Acantilado con poemas de Fonollosa. Ese disco de Albert Plá tiene, además de los poemas de Fonollosa, una version de "Take a walk on the wild side" (el lado más bestia de la vida) y esta canción. Que me gusta mucho. Pero mucho.

Y que hubo un tiempo en que era la historia de mi vida. Ahora no, ahora sé que me reencarnaré en alcachofa. O, mejor, en endibia.





Añoro todo aquello que no tuve,
lo que tuve retuve
y eso no me lo quita nadie.
Añoro solamente
lo que no vi ni en pintura,
lo que no quise que ocurriera,
lo que olvidé por desidia,
lo que no escuché por ciego;
echo de menos, me hace falta
lo que no viví ni en sueños.

Añoro, por ejemplo,
no haberme follado a Marta,
pensando mientras tanto
que me follaba a su hermana.
Y añoro a esa muchacha
que jamás he conocido
y que espera ansiosamente
el amor mío.
Y esa rayita y esa pastillita,
que no tomé contigo aquella noche.
Me duelen los recuerdos
por no haberte conocido,
ni amado ni violado
en un confesionario.
Quién pudiera haber gozado
de la luna y de tus besos,
en aquel acantilado
dentro de un Cadillac rojo.

Y por cierto,
se me olvidaba decir,
se me olvidaba decir,
lo que te vine a pedir:
¿si quieres bailar conmigo
esa canción tan bonita?
Aún no existe todavía
pero es mi canción preferida.

Estoy triste voy de luto
como si se hubieran muerto
esos seres tan queridos
que fueron mis enemigos.
Me duele la cabeza,
no me quito esa resaca
ayer me quedé en casa
no tomé ni una copita;
tampoco maté a nadie
y eso que hay quien lo merece,
por pereza o por cobarde,
nunca quise o nunca pude.

Y añoro esos zapatos que no tuve,
mis pies pisan descalzos
pues yo siempre ando desnudo.
Y eso que nunca me pinté
con purpurina todo el cuerpo,
ni me subí a ese campanario
pa' gritarle al sol y al viento:
¡me cago en la madre que parió
a esos mamones, xixarel.los
que me están chingando la existencia!

Y añoro no haber muerto cada día,
cuando llegue la muerte
yo no sabré qué hacer con ella.
A lo mejor la palmo
y resucito siendo un cerdo,
me olvido de que existo
y así no echaré nada de menos.
Engordaré deprisa
en el corral de las mentiras,
comeré lo que me echen
como cualquier cerdo bueno,
hasta que un día el granjero
me se lleve al matadero
y convierta en embutidos
mis recuerdos más grasientos.
Entonces piensa en mí,
recuérdame amor mío,
cada vez que te tomes
una tapita de chorizo.

Albert Plá

14 never more:

Martina dijo...

Sí, joder, es genial. Aunque quizá haya pocas pollas, para mi gusto.

Yo es que soy una gran seguidora de Petardas. Es una ventana abierta al mundo del porno.


Un besazo.

C. Chase dijo...

A mí me gusta mucho la de La colilla. Cómo se junta con los puros, luego con las colillas pisoteadas... Y todo el mensaje político que lleva detrás.

Un tío pintoresco Albert Plá. La última vez que lo vi iba enfundado en un saco de patatas. Supongo que seguirá igual.

Isabel Tejada Balsas dijo...

Añoro solamente
lo que no vi ni en pintura,
lo que no quise que ocurriera,
lo que olvidé por desidia,
lo que no escuché por ciego;
echo de menos, me hace falta
lo que no viví ni en sueños.
[...]
Y añoro no haber muerto cada día,
cuando llegue la muerte
yo no sabré qué hacer con ella.

:/

Juan A. dijo...

Oh, gracias, mi ama. Ilustras a este pobre golem y le permites gozar los beneficios de la más refinada gnoseología.

También me perviertes. (No tanto como quisiera, pero vamos, sí, básicamente.)

Impagable, como ya dije en el inenarrable post de Guilhem de Peitieu.

Gomorra dijo...

De fato, querida amiga galega e não-loira...

parece que não há a mesma censura aqui no blog...

Estou a gostar deveras desta minha experiência coletiva...

Por isso, publico tanto no mesmo dia...

Amo o poema d'O CORVO que postaste ali embaixo...

E, sim, vida eterna a Balthus!

WPC>

Sergio dijo...

Albert Pla, al que sigo casi desde sus inicios. Sus discos catalanes no se si se entienden mejor o peor pero desde luego se le nota más suelto. Eso de hablar en tu lengua materna ayuda mucho.
Es curioso que recientemente le he estado escuchando gracias a su nuevo disco. "La colilla" es la que más me gusta. El resto mantiene un nivel pero no veo temazos espectaculares como el que por ejemplo incluyes tú.
Aunque sigue siendo el esperable Albert Plá.
Buscaré en el youtube la entrevista con Buenafuente. Cómo casi todo lo que sale por televisión... me lo perdí.
Besos

Unknown dijo...

Pla, un personaje curioso y políticamente incorrecto, de los que, lamentablemente, van bastante escasos.

Saludos

Elaine Crespo dijo...

Maryone!

Gostei muito do teu texto pessoal!
Não sei em que reincarnarei!Acho que num Melão! Estou tomando suco de melão três vezes por dia!(risos)

A Musica tambem gostei mais não entendi alguns pedaços da tradução!
Gostei muito da maneira que ele canta , num sussuro! Gostei mesmo!


Carinhos nos meus amiguinhos!

Beijos
Elaine

Juan A. dijo...

El trovador aprenderá de las trovas del siglo. Por complacerte, más que nada, que bien sabes que es más bien arcaizante, él.

Besos.

Juan A. dijo...

Lo olvidaba: ese "dizque" del comienzo también es impagable.

Juan A. dijo...

Aun así, es adorable. Hay otra fórmula encantadora, aunque teñida de connotaciones leguleyas. Pero no deja de tener su gracia: "otrosí digo".

Juan A. dijo...

El "dizque" lo he utilizado a veces en algún verso satírico. En tiempos entretenía mis ocios con esas futilidades.

Juan A. dijo...

Ah, claro. Lo de "a la sazón" me enamora desde siempre.

Lo tienes todo. Veo.

Juan A. dijo...

Bueno, casi todo. Y algunas cosas que en principio se supone no existen. Además de calcetines secos y calentitos.